La «Comunidad Valenciana» experimentó «el bandidaje» como un problema crónico que persistió hasta el «siglo XX», alcanzando su «punto máximo entre los siglos XVI y XVII«. Durante este período, «el bandidaje» en la región se caracterizó por su «violencia y brutalidad». En este contexto, surge «La Leyenda de El Mascarat» en un desfiladero de la «Serra de Bérnia».